En determinadas situaciones puedes encontrarte en la necesidad de hacer una traducción «oficial», realizada por una persona cualificada para llevar a cabo determinados trámites, y no saber muy bien a quién acudir y qué hacer.
No te preocupes. Es muy sencillo.
¿Cuándo es necesario una traducción Jurada?
Hay determinados documentos, con textos en otros idiomas distintos al español, en los que no es suficiente con presentar una simple traducción para que te los acepten en ciertas instituciones.
En estos casos, se debe realizar una traducción jurada de dichos documentos, firmada y sellada por un traductor oficial.
En España, dicha oficialidad la confiere el Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, otorgando un sello y certificando una firma que aportan legalidad a dichas traducciones.
Diferencias entre «Traducción simple» y «Traducción jurada»
Las diferencias entre una traducción simple y una traducción jurada radican, fundamentalmente, en ese nombramiento por parte del Ministerio, ya que, a la interpretación de palabras y frases de un idioma a otro se le une la oficialidad del sello y la firma, sobre la base de unos criterios de calidad y fidelidad del mensaje traducido.
En Tradelia, contamos con un amplio equipo multilingüe de profesionales nombrados y acreditados por dicho Ministerio para poder ayudarte en cualquiera de estas situaciones, ya que nuestras traducciones tienen validez legal en toda instancia, privada o pública, en la que se presenten.
Así mismo, podemos acompañarte como intérpretes en cualquier gestión que lo requiera, en una notaría, en un juzgado, en un despacho de abogados o en cualquier institución donde sea requerida una traducción oral con eficacia jurídica.
Casos prácticos de traducciones Juradas en España
A continuación indicamos algunos ejemplos en los que vas a necesitar dichas traducciones:
- Certificados de nacimiento, matrimonio o de antecedentes penales para el trámite de permisos de residencia, nacionalidad y/o reagrupación familiar.
- Títulos y certificaciones académicas para la homologación de estudios.
- Poderes notariales para realizar gestiones en nombre de otras personas.
- Contratos empresariales de cara a hacer valer acuerdos mercantiles.
- Certificados de defunción o fes de vida para la tramitación de herencias o pensiones.
Es importante que tengas claro que todas las organizaciones, públicas y privadas, exigen siempre esta condición y debes tenerlo muy en cuenta para no perder tiempo y dinero haciendo traducciones simples, por muy certificadas ante notario que sean, ya que nunca serán aceptadas.
Por ello, desde Tradelia te ofrecemos toda nuestra experiencia y estructura para ayudarte en cualquier tipo de traducción a/desde cualquier idioma.